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         ISSN 2792-5110

HABLA DE ARTE®

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Lucía Fernández Mínguez

Pierrot le fou. Ficha cinematográfica

"La gente cataloga la aventura. Dicen: nos vamos de vacaciones, la aventura empezará cuando lleguemos al mar. Por eso, cuando están comprando el billete de tren, consideran que la aventura no ha empezado todavía. En cambio, en Pierrot le fou, todo está al mismo nivel: comprar los billetes de tren es tan apasionante como bañarse."


Jean-Luc Godard



Ficha técnica:


Duración: 107’


Año: 1965


País: Francia / Italia


Lenguas: francés


Director: Jean-Luc Godard


Ayudante de dirección: Jean-Pierre Léaud, Philippe Fourastié


Guión: Jean-Luc Godard, basado en Obession de Lionel White


Fotografía: Raoul Coutard


Sonido: René Levert


Montaje: Agnès Guillemot


Banda sonora: Antoine Duhamel, canciones escritas y compuestas por Serge Rezvani


Decorados: Pierre Guffroy


Productor: Georges de Beauregard


Productora: Dino De Laurentiis Cinematografica


Intérpretes: Jean-Paul Belmondo, Anna Karina, Graziella Galvani, Dirk Sanders, Jimmy Karoubi, Roger Dutoit y Hans Meyer, Samuel Fuller, Princesa Aïcha Abadie, Alexis Poliakoff, Raymond Devos, Lazlo Szabo.



Sinopsis:

Godard compone una película de aventuras y una historia de amor. Una de las grandes obras de un cineasta que no ha dejado nunca de reinventar el cine.


Pierrot y Marianne se reencuentran una noche después de muchos años. Huyen de París y escapan hacia el sur. Pero su huida no es sólo romántica; también está amenazada por una confusa persecución entre bandas en la que está implicada Marianne. Se aíslan, pero Marianne añora la civilización y reaparecen los problemas.



Afirmaciones de Godard sobre su filme:

Godard habló sobre su película y me pareció oportuno recalcar sus palabras:


"La gente cataloga la aventura. Dicen: nos vamos de vacaciones, la aventura empezará cuando lleguemos al mar. Por eso, cuando están comprando el billete de tren, consideran que la aventura no ha empezado todavía. En cambio, en Pierrot le fou, todo está al mismo nivel: comprar los billetes de tren es tan apasionante como bañarse."

"Velázquez, al final de su vida, ya no pintaba cosas definidas, pintaba lo que había entre las cosas definidas: no habría que describir a la gente, sino lo que hay entre la gente. Me había encontrado con un libro de Élie Faure que ya conocía, que hablaba de Velázquez y que decía que, al final de su carrera —que era para mí el comienzo de la mía, pero yo no lo sabía—, que al final de su carrera, Velázquez pintaba las cosas que hay entre las cosas, y me doy cuenta de que... poco a poco... el cine es lo que está entre las cosas, no las cosas, sino lo que hay entre una persona y otra persona, entre tú y yo, y luego, en la pantalla, está entre las cosas!"

El cineasta Jean-Luc Godard


"Los cuadros más importantes son retratos. Está Velázquez. El pintor que quiere plasmar un rostro plasma únicamente el exterior de la gente; y, sin embargo, hay algo más. Es muy misterioso. Es una aventura."

"Cuando circulamos por París de noche, ¿qué vemos? Semáforos rojos, verdes y amarillos. He querido mostrar esos elementos, pero sin tener que situarlos necesariamente como están en la realidad. Mostrarlos más bien como quedan en el recuerdo: manchas rojas, verdes, destellos amarillos que pasan. He querido fabricar una sensación a partir de los elementos que la componen."


Elementos técnicos:

Jean-Luc Godard es uno de los grandes “retratistas” del cine, en sus planos de rostros late la mirada de pintor. Es interesante detenernos en algunos “plano-retrato”


Godard hablaba de Vivre sa vie, su película anterior, también con Ana Karina como protagonista: "Los cuadros más importantes son retratos. Está Velázquez. El pintor que quiere plasmar un rostro plasma únicamente el exterior de la gente; y, sin embargo, hay algo más. Es muy misterioso. Es una aventura."



El color:

El color es uno de los elementos esenciales de Pierrot le fou, una película para adentrarnos en el valor del color en el cine. Los grandes cineastas limitan los colores de sus filmes, los organizan y depuran. Para cada película se definen unos colores predominantes o principales, una gama cromática que la caracteriza: es su paleta de color. El color, pues, se define primero globalmente (para el conjunto del filme) y después, localmente: secuencia por secuencia, plano por plano. El rojo (en el interior del coche, las rayas del vestido que lleva Anna Karina) es uno de los colores vivos que marcan el ritmo de la película. Frente a una época decadente, el cineasta se vale de todas las formas de arte, incluyendo la literatura, la novela y la poesía.



El formato:

Pierrot le fou está rodada en formato Techniscope, con unas proporciones 2,35:1. La elección del formato es fundamental en toda película, pero pocas veces somos del todo conscientes de ello.



Música:

Godard es uno de los cineastas que más y mejor ha trabajado la música en el cine. Pierrot le fou busca la transmisión de un arte total: una película, una sinfonía, un poema, un cuadro, una novela que mezcla los grandes autores (de Auguste Renoir a LouisFerdinand Céline) con la cultura popular (novelas baratas, cómics, publicidad).


Para Jean-Luc Godard, el cine es una forma que reflexiona sobre su propio arte, sobre el mundo y el presente, y con una gran capacidad para acoger potencias opuestas: el amor romántico confrontado al caos del mundo, lo burlesco con la tragedia.



Mis amigos piensan que Jean-Luc Godard es un cineasta difícil y no entienden sus películas. Para mi es un cineasta ambicioso por el arte que intenta transmitir. Godard es alguien sensible y cuidadoso. Esta película muestra la resistencia de la realidad frente a las utopías, la omnipresencia de la violencia, el conflicto entre el materialismo y el idealismo, la dificultad de ser y la grandeza de los sentimientos. Por estos y otros temas que trata, esta película me parece una obra de arte.



Referencias que se encuentran en la película:


– Una larga lista de escritores (Balzac, Baudelaire, Jules Verne, “un puerto, como en las novelas de Conrad”, “un velero, como en las novelas de Stevenson”...).


– Títulos de libros (Las palabras y las cosas de Jean-Paul Sartre, Una temporada en el infierno de Arthur Rimbaud, el “al fin de la noche” que declara Pierrot hace referencia al Viaje al fin de la noche de Louis-Ferdinand Céine, uno de los escritores preferidos de Godard, que incluso llama Ferdinand a su personaje principal).


– Varios fragmentos se leen en voz alta, por ejemplo: “¡Ay! Qué terribles cinco de la tarde” (fragmento del poema La cogida y la muerte de Federico García Lorca).

Esa voracidad de citas literarias no tiene nada de sorprendente viniendo del cineasta, que respondía así a una pregunta sobre el seudónimo (Hans Lucas) que utilizaba para firmar algunos de sus artículos: “No tenia nada que ver con mi familia, era sobre todo por referencia literaria, ya que en aquella época mi ambición era publicar una novela con Gallimard.” Estáclaro que el Pierrot escritor -que fusiona su utopía con la literatura -es aquí el alter-ego del Godard novelista, quien probablemente escribió́el diario del personaje de su puño y letra. Pierrot le fou se ve, se oye y se escucha, pero también se lee: la ambición literaria se une a las búsquedas visuales . Así. Godard añade un cuarto componente que tradicionalmente no suele aparecer en el cine salvo en los créditos pues le falta a priori una dimensión visual: la escritura.



El texto escrito en la película:

Permite crear tensión ya que accedemos a elementos dramáticos que se ocultan hasta que se muestran en la película. Además, es útil para desvelar aquello que es imposible de mostrar. El mundo interior, el diario de Pierrot. El texto escrito anuncia lo que va a suceder, y lo hace mediante elementos escritos y visuales.



Personajes y planos:

Los actores se dirigen a cámara en planos precisos, convirtiendo al espectador en testigo. Es uno de los elementos de la modernidad cinematográfica que Godard utiliza más frecuentemente en sus películas.

Destaca que los personajes pongan en práctica el hecho de mirar a cámara para dirigirse al espectador.



Al Godard critico y cinéfilo le impactó profundamente la mirada a cámara de Un verano con Mónica de Ingmar Bergman, sobre la que escribió en 1958. Desde su primera película no ha dejado de explorar esta forma de indagar en el actor e interpelar al espectador.


Admira especialmente el cine americano, al que hace constantes referencias. Podríamos pensar que ha tenido en mente la historia de Bonnie & Clyde, que Arthur Penn llevó a la gran pantalla dos años después. Godard también ha elegido un formato de imagen muy panorámico (2,35:1) que realza la belleza de los espacios y le da una dimensión épica a la historia. Antes de entregarse a una exitosa carrera comercial, JeanPaul Belmondo, que se dio a conocer con Al final de la escapada (Àbout de souffle, 1959), el primer largometraje de Jean-Luc Godard, fue uno de los nombres insignes de la Nouvelle Vague.


Ana Karina fue más que la compañera del cineasta: una verdadera musa con quien mantuvo una relación amorosa y artística pasional en la que se entremezclaban vida y obra.



Musicalidad:

La película se caracteriza por varios números musicales atípicos, como cuando Pierrot hace referencia a los tres golpes de la 5a sinfonía de Beethoven, cuyas notas hace resonar como si fuese un di- rector de orquesta. O cuando Raymond Devos es la única persona capaz de escuchar la cantinela que le persigue tanto como sus amores.


Además de eso, Godard cuestiona las convenciones cuando hace aparecer en pantalla la fuente de la música -un tocadiscos colocado cerca de la orilla del mar. Cuando el tocadiscos deja de sonar porque queda empapado por las olas, la música vuelve a escucharse en el plano siguiente.



Opinión personal:

Cuando vi Pierrot le fou, tenía 15 años. No sabía quién era Godard. No sabía que iba a presenciar un choque emocional o vivir el curso de una obra de arte; yo no sabía que el cine pudiese ser una obra de arte. Encontré esta película por casualidad, por su curioso título (Pierrot el loco), Quería saber más de la Nouvelle Vague después de haber visto 400 golpes.


Me daba la impresión de que la película me hablaba a mi, era como si me recitaran una poesía. A partir de entonces no concebí el arte de la misma forma. Eta película me introdujo más en el mundo del cine y me hizo verlo como una obra de arte total. Aprendí sobre el arte y mis deseos de convertirme en artista se fortalecieron. Digamos que gracias a esta película ahora estoy donde estoy. Gracias a esta película supe valorar el arte.


Cartelería para el Filme Pierrot le Fou






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